No quiero promesas en la playa, promesas frágiles de arena, ni verdades a medias, ni eternos perdones. No quiero palabras para tapar realidades, ni silencios para ocultar sentimientos. No quiero dudas escondidas entre besos, ni culpas ahogadas entre abrazos, ni miedos temblando entre caricias. No quiero siempres, ni mañanas, ni tu vida entera, ni tus labios míos. Quiero atardeceres nuestros, no recuerdos de canciones, ni fotos en la billetera y de fondo de pantalla. No quiero que olvides él pasado, ni siquiera que lo enfrentes, me gustaría que algún día lo superes, que lo ganes. Es tuyo y si queres lo comparto. Puedo dormir con él, contigo. No quiero que lo evites. No quiero que te mientas, ni me mientas. No quiero que te arrepientas. No quiero ser tu próximo pasado, ni quiero dormir mañana contigo, quiero despertar siempre con vos.
Sólo que no quiero que me ames si no vas a saber amarme...