martes, 30 de agosto de 2011

¿Quién habló de perversión? Cuando me encontraba reflejada en sus ojos, cuando me veía construída en su deseo, yo era por completo inocente. Porque uno siempre es inocente cuando ama, siempre regresa a la misma edad emocional, al umbral de la eterna adolescencia. Pura y hermosa fui porque deseé y me desearon. El amor es una mentira, pero funciona.

1 comentario:

Melanie Zaia dijo...

El amor es como una mentira, va lo es. Tenés razón :/